"Dame suficiente café, y dominaré el mundo" Anónimo
Aunque el origen del café sigue sin esclarecerse, se cree que esta bebida tomada comúnmente caliente se remonta al siglo XIII cuando la tribu Oromo de Etiopía descubrió los efectos energizantes de los granos de la planta del café (coffea).
Hoy día el café es tan elogiado como denostado creando divisiones en cuanto a su inocuidad, es por ello que, a pesar de ser una de las sustancias más comunes en todo el mundo recibiendo fuertes elogios, su reputación en medios convencionales como televisión, revistas o radio no es la mejor.
Paradójicamente, apenas nos preocupa el consumo de bebidas carbonatadas azucaradas con cafeína... ¿Quién no ha tomado alguna vez varias de estas bebidas durante épocas de exámenes o para entrenar sin sentir preocupación por sus efectos perjudiciales?
Si bien es cierto que el consumo excesivo de café puede afectar a nuestra salud produciendo diversos efectos secundarios, en dosis moderadas presenta una amplia multitud de beneficios que hoy son respaldados por la literatura científica (estudio).
Probablemente hayas escuchado más de un beneficio que el café puede aportar, pues sus beneficios son inconmensurables.
El consumo de café se asocia a una reducción del riesgo de varios tipos de cánceres (estudio). Este estudio evaluó la asociación entre el consumo habitual de café y la mortalidad cardiovascular y por cáncer en la población Española durante un periodo de 18 años a más de 1.000 participantes a partir de los 20 años de edad, y se comprobó que el consumo moderado de café (especialmente con cafeína) se relaciona con una menor mortalidad de cualquier tipo de cáncer.
Donde se ha visto un mayor efecto del café es en el cáncer de hígado (estudio, estudio) colon (estudio) y próstata (estudio).
Pero el café no solo beneficia al hígado reduciendo el riesgo de padecer cáncer, también puede prevenir diferentes enfermedades hepáticas. Muchos estudios han demostrado que el consumo de café (y no otras bebidas cafeinadas) se asocia a un menor riesgo de cirrosis e hígado graso (estudio, estudio, estudio). Además, esta bebida ha demostrado reducir las probabilidades de padecer diabetes tipo II (estudio) y en general consigue reducir la mortalidad por cualquier causa (estudio, estudio).
La fama del café se atribuye en gran parte a su capacidad estimulante. Este efecto es producido por una molécula, la cafeína. Dicha sustancia es considerada "droga inteligente" o nootrópico jugando un papel importante en los avances de la revolución industrial y así lo afirman diversos historiadores (dato).
Antes de la llegada del café al mundo occidental, muchas personas bebían cerveza con asiduidad hasta el punto de empezar el día con una "sopa de cerveza" o "Biersuppe", pero tras la aparición de las primeras cafeterías se intercambió la sedante cerveza por el estimulante café dando pie a personas más activas y enérgicas para coordinar su trabajo incrementando su eficiencia.
¿Por qué nos estimula el café?
La actividad neuronal que mantenemos desde el instante en que despertamos produce adenosina (sustancia que juega un papel muy importante en diversos procesos metabólicos). El cerebro cuenta con receptores de adenosina que buscan constantemente la acumulación de esta sustancia, y cuando supera ciertos umbrales se origina la sensación típica de sueño o cansancio. Sin embargo, la cafeína posee una estructura molecular similar a la adenosina provocando que también sean acumulados por los receptores de nuestro cerebro, pero sin producir esa típica sensación de somnolencia. Como resultado, obtenemos un cerebro con moléculas de adenosina y cafeína provocando una inhibición del cansancio y permitiendo que la dopamina y el glutamato (estimulantes naturales del cerebro) circulen libremente (estudio).
Es aquí donde encontramos lo asombroso de esta bebida, puesto que su efecto secundario más marcado es la "desactivación" de los sensores de sueño del cerebro y el efecto estimulante lo proporcionará tu propio cuerpo de forma natural. Por esto mismo existen personas que responden más que otras.
Beber café con cafeína no te estimulará más allá de lo que tu propio cuerpo te puede ofrecer.
El consumo moderado de esta bebida junto con su molécula estrella, la cafeína, produce un incremento en la atención y la concentración, reduce el tiempo de reacción y mitiga la fatiga considerablemente (estudio, estudio, estudio).
Todo esto genera sensación de peligro al pensar que estas mejoras ocasionadas a corto plazo en nuestro cerebro podrían afectar a la salud mental, pues excitamos este órgano excesivamente. Pero estudios demuestran como el consumo de café se asocia a mejoras cognitivas al disminuir el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer (estudio, estudio, estudio) o el Párkinson (estudio) e incluso llegando a reducir el riesgo de suicidio (estudio).
Es lógico pensar que, si el café nos estimula disminuyendo la sensación de sueño y aumenta la atención y concentración al permitir que la dopamina o el glutamato campen a sus anchas por el cerebro, también puede proporcionar un plus en el rendimiento físico. Y así sucede, puesto que la cafeína afecta a tres sistemas de manera integrada.
-Acción en el SNC: La cafeína no solo promueve la libre circulación de dopamina, también de adrenalina (estudio) generando una elevación en el umbral del esfuerzo y el dolor muscular (estudio, estudio) mejorando la resistencia de los músculos en ejercicios mantenidos hasta el fallo.
-Potencia la actividad muscular: En este estudio cruzado, aleatorizado y a doble ciego se evaluaron a 10 hombres de aproximadamente 22 años que fueron sometidos a una prueba de extensión de rodilla tras la ingesta de cafeína o placebo. El análisis demostró que la fuerza sometida alrededor del eje de rotación fue significativamente mayor en aquellos que se suplementaron con cafeína. Además, reduce el dolor muscular ocasionado por el entrenamiento (estudio).
-Interviene en el metabolismo: La cafeína favorece la movilización de la grasa (estudio, estudio, estudio) ampliando su quema (oxidación) durante el ejercicio físico con dosis superiores a 3 mg/Kg de peso. Esto puede beneficiar en especial durante pruebas aeróbicas, pues al crear una mayor disponibilidad de ácidos grasos, el glucógeno (principal fuente de energía) puede ser reservado aplazando así la fatiga (estudio, estudio)
-Aumenta la capacidad anaeróbica: Hemos visto que la cafeína nos ofrece un impulso extra en pruebas de resistencia tipo aeróbico al priorizar el uso de las grasas reservando el glucógeno para cuando estas disminuyen, peso esto no es todo. Esta molécula cuenta con beneficios durante los ejercicios anaeróbicos otorgando más fuerza para realizar unas repeticiones extra (estudio). Esta mejora no se da solo en hombres, también en mujeres (estudio).
Es habitual pensar que la cafeína debe tomarse como pre-entreno dado que aporta una inmensa cantidad de beneficios a nuestro rendimiento deportivo. Curiosamente, después del entreno también se hallan beneficios. Al suministrar cafeína a nuestro cuerpo por medio de un café, por ejemplo, se mejora la síntesis del glucógeno muscular (estudio).
Por tanto, para entrenos mañaneros donde no has podido tomarte tu primer café o para entrenamientos dobles, ingerir cafeína en el post-entreno en dosis bajas o moderadas junto a una fuente de carbohidratos como frutas o cereales integrales, ocasiona una agilización en la recarga del glucógeno muscular proporcionando más fuerza y energía para el siguiente entreno o el resto del día (estudio).
Cuida el origen:
El café se ha convertido en la segunda bebida más consumida en el mundo después del agua, y desde su uso en la revolución industrial no ha hecho más que expandirse sin cesar por todo el planeta.
Por desgracia, todo lo "viral" crea negocio y las industrias alimentarias son atraídas como chacales para producir dinero a nuestra costa. De esta forma pasamos del meticuloso arte artesanal del café con su tostado, molido y empaquetado al café procesado industrialmente con maquinaria y plásticos que poco cuidan la esencia del café, hasta el punto de inventar famosas cafeteras específicas para cápsulas monodosis incrementando el plástico y aluminio que desechamos al medio ambiente.
Las industrias no son tontas y donde antes habitaba la simpleza y el glamur de una taza de café preparada con tu cafetera italiana necesitando únicamente agua y fuego, pasamos al monopolio industrial con máquinas en lugar de cafeteras, aparentemente baratas, donde el único café permitido es el suyo con precios inflados (las "cafeteras" son baratas porque su "café" es caro) y excediendo el uso de materiales contaminantes.
La ironía del café: Impulsó la revolución industrial y esta misma se carga la esencia del café para mantener su imperio. Por suerte estás aquí, leyendo estas palabras las cuales espero que broten en ti rebeldía frente a las poderosas industrias.
Por lo tanto, el origen importa. Lo ideal es comprar el café en grano y molerlo el mismo día de su preparación, pues así minimizamos al máximo la pérdida de aroma y evitamos su oxidación, pero sé que moler café puede convertirse en algo tedioso, por esto mismo puedes acudir a una tienda especializada en café donde ellos mismos muelan los granos justo antes de su compra.
Es preferible gastar 3 euros más en un café de calidad para alejarnos de los cafés baratos de los supermercados.
Realmente esto no es la lucha contra las industrias, es la lucha por un mejor café.
Dopa tu café:
Soy consciente de la vigorosa defensa que acabo de hacer sobre un café puro, pero antes de pensar que me estoy contradiciendo, concede una oportunidad a estas combinaciones, que aparte de mejorar el sabor, es probable que tus niveles de energía aumenten a diferencia de la toma del café solo. Y si mis palabras no te animan a probar estas combinaciones, piensa en el profesional del café, el barista. Este es el responsable de la presentación del café y debe crear nuevas bebidas basadas en él usando distintos líquidos como leches o licores (nada preferible para tomar con asiduidad) o esencias, entre otros. Imagina que eres un barista creando combinaciones con el café.
-Café con canela: Empezamos por lo básico y menos "chocante" a la hora de aderezar el café. Prueba el café con un poco de canela. Esta especia proveniente del árbol de la canela o canelo, presenta una serie de beneficios para la salud muy interesantes (estudio). El más reconocido es su capacidad de mejorar la sensibilidad a la insulina (estudio, estudio) y a la vez sirve de endulzante siendo el mejor aderezo para aquellas personas que quieran añadir un ligero toque dulce a su taza.
Mi recomendación es mezclar el café molido junto con un poco de canela (al gusto) antes de la preparación, así lograremos que el café se infusione junto con la canela pasando ambos por el filtro y creando una mayor homogeneidad. Si echas canela directamente a la taza de café, esta no se diluirá pudiendo ser desagradable para algunos.
-Café con cacao puro desgrasado: El cacao proviene del del árbol cacaotero presente en regiones tropicales y subtropicales de América del Sur. Su nombre científico proviene del latín, Theobroma que significa "alimento de los dioses".
Este alimento cuenta con cafeína pudiendo potenciar aún más los beneficiarnos de esta molécula si añadimos un par de cucharaditas de cacao puro desgrasado al café. Además de esto, el cacao posee multitud de beneficios para el organismo que van más allá de su presencia de cafeína (estudio).
A diferencia de la canela, el cacao en polvo se puede añadir directamente a la taza con la cucharilla, pero hay que tener en cuenta un detalle, para que el cacao se diluya correctamente el café debe estar caliente, de esta forma evitaremos grumos y proporcionaremos a nuestro café un toque más amargo.
Café con cacao, un desafío para paladares exigentes.
-Café con té: ¿Te gusta el té tanto como el café, pero omites uno para priorizar el otro? ¡No lo hagas! Es tu oportunidad para probar esta impresionante combinación.
El té cuenta con L-teanina, aminoácido presente mayoritariamente en el té verde o negro y considerado nootrópico. Al igual que la cafeína, la L-teanina presenta efectos beneficiosos sobre la cognición y el estado de ánimo (estudio, estudio, estudio), pero si quieres potenciar todos estos beneficios y llevarlos a otro nivel prueba a combinar L-teanina con cafeína. Esta combinación brinda beneficios cognitivos únicos a la vez que minimiza los efectos estimulantes de la cafeína como el nerviosismo o las taquicardias (estudio, estudio, estudio, estudio).
Puedes probar a añadir L-teanina como suplemento al café o probar a echar una bolsita de té junto con el café para infusionar ambos en la misma bebida.
El café ha demostrado poderosos beneficios para el organismo, desde mejoras en el rendimiento físico y cognitivo, hasta la prevención de enfermedades neurodegenerativas. Sin embargo, esto no significa que sea de vital importancia beber café todos los días.
Si te gusta el café disfrutalo sin miedo. Antes de preocuparte por las posibles inconveniencias que nos puede causar el café, preocúpate por lo verdaderamente malo, las bebidas carbonatadas ultraprocesadas que bebemos asiduamente sin miedo alguno de sus riesgos reales. Mientras el consumo de café sea moderado no debes preocuparte de los posibles riesgos, es más, los estudios llegan a ver beneficios hasta un máximo de 4-6 tazas de café al día, innecesario a incorporar en nuestros hábitos de vida ya que puede interrumpir el descanso nocturno, algo verdaderamente perjudicial, pero interesante para replantearnos los riesgos que tanto denuestan al asombroso café.
Por el contrario, si no te gusta el café no sientas la obligación de tomarlo, piensa que todo es multifactorial y si tu estilo de vida es pésimo el café no va a revertirlo. Incluso el hecho de tomar café en momentos puntuales ayudará a que los efectos sean más pronunciados disponiendo así de un "as en la manga" para aquellos días que necesites un extra de energía.